Hasta hace poco los marketeros y publicistas estaban intrigados por el comportamiento de la generación que se denominó “Millennial”. La de los que alcanzaron la mayoría de edad con el cambio de siglo, los nativos digitales, los que no usan reloj, los que abrazan causas sociales, los preocupados por el ambiente y que prefiere enviar textos desde sus teléfonos antes que hablar con otros seres humanos. La generación de “cristal” también la han llamado, no tolera críticas y la “corrección política” es también su distintivo. El desafío de las marcas ha sido encontrar maneras de comunicarse con ellos y convertirlos en consumidores de productos y servicios desarrollados para satisfacer sus necesidades.
Ahora la preocupación está centrada en los “Z”, los que nacieron a partir del 2.000 y ya presentan nuevos desafíos por sus características únicas, no sólo prefieren marcas con un propósito social claro, sino que defiendan la transparencia y compartan los mismos valores, esta nueva generación está marcada por la turbulencia económica y son más conservadores en el gasto que la anterior que estaba muy dispuesta a pagar por experiencias de alto valor. Ellos nacieron con un teléfono inteligente en la mano y su manera de entender el mundo e interactuar con las marcas se da por esa vía casi exclusivamente.
Los “zetas” se mueven en el mundo de los NFT´S (Non fungible tokens) en inversiones, arte, música, juegos “play-to-earn”. Ellos están explorando este nuevo mundo desde aspectos cómo el ocio a través del gaming o su desarrollo profesional y económico generando NFT´s para su venta.
Un estudio realizado por la consultora española Darwin & Verne nos dice que en ese país el 75% de su muestra declara haber entrado o conocer a alguien que haya participado del mercado de los NFT´s o Cryptos.
Están en la búsqueda de mejores rendimientos de su dinero a través de cryptomonedas ya que no están dispuestos a entregar 8 horas diarias de su vida por un salario. Lo llamativo de este hallazgo es que en el mismo estudio declaran su falta de educación financiera.
Esto ha generado una importante oportunidad de negocios en el área bancaria y un banco alemán llamado N26, (con licencia para toda la zona Euro) ha resultado muy atractivo para este grupo por su singular manera de operar sin cobrar comisiones ocultas, es 100% digital y sólo tiene una oficina en Berlín. Está en la lista de los mejores bancos del mundo de Forbes y ya tiene más de 7 millones de clientes. Su comunicación directa, humorística e irreverente se ejecuta casi en su totalidad en vía pública, que sin lugar a dudas es el medio masivo que nadie puede evitar ver.
Horacio Chavarría P.
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